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El correr prolonga la vida

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Un reciente estudio cient?fico realizado por la Universidad Estatal de Iowa sobre el impacto de la pr?ctica de running en la longevidad de las personas, determina que los corredores tienen entre un 25 y un 40% m?s de posibilidades de reducir el riesgo de padecer una muerte prematura, en relaci?n a personas sedentarias, e incluso aficionados a otros deportes.

El estudio en cuesti?n asegura que hacer deporte alarga la esperanza de vida, pero algunos deportes lo hacen m?s que otros. En este sentido, la pr?ctica de otros deportes o actividades f?sicas como caminar o andar en bicicleta, permiten una reducci?n del riesgo de muerte prematura en un 12%, lejos del 25 al 40% que el estudio atribuye a los corredores habituales.?
Seg?n los expertos, esta reducci?n en el riesgo de muerte prematura se relaciona con la reducci?n de los factores de riesgo asociados a la muerte s?bita, la hipertensi?n y el exceso de grasa corporal.

Una hora de trote por siete horas de vida
En concreto, en la pr?ctica de running, el estudio defiende que correr una hora al d?a permite, aproximadamente, vivir siete horas m?s. En cuesti?n de h?bitos entre corredores y no corredores, ?stos ?ltimos tienden a vivir de media unos tres a?os menos que los primeros. Todo ello sin importar el ritmo, la distancia recorrida o factores nocivos para la salud como el tabaco o la bebida, seg?n la investigaci?n realizada. El estudio tambi?n tuvo en cuenta a personas hipertensas u obesas.
Sin embargo, como explic? al peri?dico The New York Times el autor principal de la investigaci?n, Duck-chul Lee, ?estos agregados no son infinitos?. Correr no convierte a las personas en inmortales. Siempre que la practica se lleve a cabo durante 40 a?os consecutivos, el tope m?ximo al que se podr?a llegar es de aproximadamente 36 meses.
Adem?s, los autores de la investigaci?n indican que, adem?s de correr, los h?bitos saludables de vida asociados a los que practican esta disciplina tambi?n tienen un gran impacto positivo en la salud de estas personas, y por lo tanto, condicionan en cierta manera su asociaci?n con la longevidad y la minimizaci?n de los riesgos de muerte prematura.