La carrera fue muy dura y espero que se repita
25K Terma Adventure Race Miramar, 2 de noviembre de 2014
Escribe Pablo Soifer, Dorsal 31
Todo comenz? el d?a anterior, cuando reconoc? un poco el lugar por donde correr?amos (solo un poco, era muy dif?cil por m?s que tuviera un mapa, saber bien por que senderos ?bamos a tomar) y fui a buscar el kit de corredor. Por la noche tuvimos la charla t?cnica en el polideportivo de la ciudad, el fr?o era brutal y el polideportivo quedaba frente a la costa lo cual lo hizo m?s complicado.?
En la charla, a cargo de la gente del Club de Corredores, organizadores del evento empez? el miedo. Comenzaron a hablar de lo dura que iba a ser la carrera y lo complicado que lo tendr?amos. De hecho supuestamente cambiaron partes del recorrido por las crecidas de agua dadas las lluvias torrenciales recientes en la zona. Sirvi? para advertirnos de no quemar energ?as al principio en el asfalto, que la segunda etapa, llena de m?danos iba a ser dur?sima, que nos ?bamos a mojar mucho los pies y que llevaramos buenas medias (al menos los feriantes de la expo vendieron much?simos pares tras la charla) ya que tras mojarnos nos llenar?amos de arena en una dura corrida por la playa. Tras la charla me d? cuenta que mi cara de susto no era la ?nica de la sala, creo que varios se fueron preocupados, la descripci?n que hizo el organizador fue bastante apocal?ptica por decirlo de alguna manera.
Me tranquilic?, me retir? a cenar pensando una estrategia de cara a lo que hab?a dicho y mientras com?a me dije que si lo duro era la segunda etapa, entonces solo ser?a cuesti?n de guardar energ?as durante la primera. Eso era todo lo que pod?a pensar como estrategia, aparte de saber que me tendr?a que tomar todo con calma.
La ma?ana del domingo amaneci? soleada, pero tremendamente fr?a. Me puse la remera t?rmica, la remera de la carrera, el cinto con las botellitas y desayun? algo. Si bien la temperatura no era tan baja, al acercarme a la costanera por una calle principal casi desierta, el fr?o empez? a hacerse sentir y el viento era algo apenas soportable. El clima en la zona de la largada era el de siempre antes de una carrera: de una felicidad absoluta.
Al largar vi que muchos me pasaban, coriendo el primer kil?metro y medio de asfalto como si fuera un 10k de calle. Trat? de no sumarme a esa ola que iba r?pida y los resultados fueron buenos (vi muchos quemados a medio camino). Entrando a la zona del vivero ya formaba parte de un grupo de gente que iba m?s o menos a mi ritmo y trat? de estar tranquilo todo el tiempo, guardando energ?as como sea y contemplando el hermoso paisaje del vivero. Pasada la primer etapa, vi que muchos que corrian conmigo estaban compitiendo en modalidad postas y cambiaban por corredores m?s frescos, listos para entrar en la etapa m?s complicada de la carrera. Y era cierto que esta etapa era dif?cil. El primer kil?metro ?bamos a la vera de la ruta once por un camino muy poceado donde era sencillo lesionarme as? que anduve con mucho cuidado. Nos hicieron doblar, pasar un alambrado y cruzar un arroyo por unas tablas bastante h?medas por las cuales m?s de uno debe haber resbalado. No fue mi caso as? que tuve la suerte de salir entero de ese lugar. Luego vino un hermoso paisaje, un camino rodeado de pinos que nos acompa?? un buen tramo hasta que encontramos un camino lleno de agua. Las marcas dec?an que hab?a que pasar por ah? y nos pregunt?bamos si era as? el asunto. La confirmaci?n fue que uno que ven?a atr?s nuestro entr? corriendo al agua como si no existiera y ah? nom?s lo seguimos. Salidos de eso empez? la zona de los m?danos, uno m?s alto que el otro y con una inclinaci?n que hac?a que a duras penas se pudiera subir. A esta altura no ten?a la menor duda que esto era lo m?s duro de la carrera. Con las piernas ya cansadas por las trepadas entramos directo en la zona de playa y ah? fueron varios kil?metros de arena, que con el cansancio que ya tra?a se hicieron dur?simos. Sumado a esto el fr?o, el viento que no ced?a y las olas que a veces volv?an a mojarme los pies, la cosa se puso dura. As? comenz? la tercera etapa y varios corredores cambiaron por la tercera posta mientras yo intercambiaba solo por una versi?n m?s cansada de mi mismo. Solo ve?a hacia adelante una larga fila de corredores, que no terminaba nunca, yendo por la orilla, me parec?a que esto iba a ser eterno, pero la ?nica soluci?n era mentalizarse, mirar el mar, disfrutar y olvidar el dolor.
Por fin, hacia el kil?metro veinte salimos de la playa y entramos nuevamente en el bosque para ir agachados bajo un t?nel de ramas que hac?an muy dif?cil hasta caminar con cautela. Apenas salimos del t?nel pude nuevamente estirar las piernas y correr, sobrepasando a algunos corredores que estaban, parece, en peor estado que yo. Saliendo del bosque y entrando en el camino de tierra que nos llevaba ota vez hacia el asfalto, y realmente destruido, me puse a charlar con otro runner con el que nos ?bamos contando cosas de la vida esperando olvidar el dolor y el cansancio. Entrando en el asfalto lo salud? y empec? a acelerar con las ?ltimas fuerzas que quedaban para cruzar la meta con un grito de triunfo, recibir la medalla y tomar una cerveza que entregaba una famosa marca a todos aquellos que terminaban la carrera.
El balance de la carrera es que fue muy linda, dura, y espero que se repita y quede en el calendario anual.
Pablo Soifer, Dorsal 31
@TortuCommand